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Un día cualquiera En clave de Sol

Cada niño que llega a nuestro hogar es recibido como parte de nuestra familia, cada día es una aventura en la que la llegada a En clave de Sol suele ser escalonada, algunos niños desayunan al llegar mientras los demás ya han empezado los juegos. Una vez todos tenemos las pilas cargadas estamos preparados para aprender los unos de los otros,  jugando, pintando, compartiendo, cantando, bailando, leyendo cuentos en inglés y en español... Si el tiempo acompaña nos vamos un ratito al parque y/o de paseo, sino, tenemos nuestra terraza con arenero, y en verano, nuestra propia piscinita. A la vuelta, como tendremos hambre, nos lavamos las manos y nos sentamos juntos a comer, unos a la mesa como los mayores y otros en sus tronas. Y después a descansar… Tras la siesta unos se levantan y al rato ya están de vuelta sus padres y otros meriendan y todavía les da tiempo a jugar otro rato. Y así, cuando todos los niños se han marchado, aprovecho para recoger y prepararlo todo para el día siguiente.

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